Según el portal Invertia de México, ese país: “exporta bienes y servicios "creativos" por un monto anual [de] 4 mil 271 millones de dólares y esto lo colocó en el primer lugar como economía creativa en América Latina y en el 18 a nivel mundial, de acuerdo con datos recopilados en 108 países por la Conferencia de la Naciones Unidas sobre el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD).”
Considerando al sector tal como lo hace la UNCTAD el portal agrega que: “Las industrias que integran este sector van desde las artesanías tradicionales hasta las productoras de hardware, pasando por la industria editorial, pintura, cine y teatro entre otras.”
Reproduce declaraciones de Cesar Castro, director de Análisis del Centro de Análisis y Proyecciones Económicas para México (CAPEM) quien dijo “En la medida en que los productos tradicionales de exportación como el petróleo se empiecen a agotar, se tienen que generar gradualmente alternativas de ingresos por ventas externas, en ese sentido el potencial de industrias creativas en México es elevado, contamos con reconocido acervo cultural y artístico importante, con capital intelectual, mano de obra artesanal competitiva y una importante oferta de servicios turísticos, festividades y atractivos para el resto del mundo”
Recordemos que para aquel organismo internacional las industrias creativas incluyen, además de las artes y los medios electrónicos de comunicación a la industria del software. De tal modo las cifras relativas a industrias culturales, en un sentido más estricto, serían diferentes.
Pero en cualquier caso conviene retener un dato: las industrias creativas en general y las culturales en particular son una fuente alternativa de ingresos para cualquier economía capaz de promover el talento humano. Apenas eso.
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