15 diciembre, 2010

Economía y cultura en la Argentina: haciendo cuentas

“Hacer la cuenta” y “Valor y Símbolo” son dos nuevas publicaciones del Sistema de Información Cultural de la Argentina que vale la pena leer detenidamente si se quiere profundizar la relación entre economía y cultura en nuestro país.
“Hacer la cuenta” sistematiza la información recopilada por el SinCA sobre gasto cultural de las provincias argentinas y del estado nacional así como las diferentes institucionalidades que asume en esas jurisdicciones el sector cultura.

Se destaca el crecimiento del producto bruto cultural que pasó del 2,3 % en el 2004 al 3,5% en 2009. Analiza también el gasto cultural por habitante en el total del país arrojando un valor de casi 26 pesos – unos 5 euros.

El análisis provincia por provincia muestra un altísimo nivel de dispersión entre los extremos: 119 pesos (poco más de 22 euros) por habitante en la Provincia de San Luis – la que más gasta – y apenas un 1 peso para Formosa, la de menor presupuesto.

Hace un pormenorizado análisis del gasto provincial y su relación con el desarrollo económico. Dice:

“La asociación es directa: frente a un mejor desempeño socioeconómico, se observa un mayor gasto destinado a cultura (medido en porcentaje sobre el total y como gasto por habitante); ante un desempeño socioeconómico más pobre, menor será el gasto destinado a cultura”.
En “Valor y Símbolo” se repasa tanto la historia de las industrias culturales en la Argentina como su desempeño actual abarcando diarios y revistas; libros; discos; películas; radio; televisión.

En las industrias culturales también se pueden observar profundas asimetrías: la ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, tiene apenas el 7,7% de la población pero concentra el 67,3% de los títulos editados. Y si se compara la cantidad de ejemplares publicados la participación llega al 84,2%.

La verdad es que estas asimetrías de la estructura cultural argentina son bastante conocidas. Por caso, ya nos habíamos ocupado de ellas en dos artículos: La cultura partida y Federalismo y cultura.

Lo extraordinariamente valioso es la recopilación de datos e indicadores que realizó el SinCa brindándonos una base de datos para debatir el tema con mayor pertinencia. Párrafo aparte merece la excelente atención de este organismo público: para recibir los ejemplares impresos solo tuvimos que pedirlos por correo electrónico y luego pasar a buscarlos. Y además los están poniendo en línea para que cualquiera pueda bajarlos de su sitio.

Espero que nuestro lectores – por lo menos los de Argentina – consulten y trabajen sobre estos datos; tal vez así podamos empezar a diseñar un plan nacional de cultura que permita desandar nuestros profundos desequilibrios.

01 diciembre, 2010

Patrimonio cultural y nuevas tecnologías

El patrimonio cultural puede ser pensado como tecnología acumulada en el tiempo y el espacio por la especie humana. Espacio progresivamente empequeñecido por las tecnologías del movimiento, el transporte y la proyección.
Tiempo profundamente alterado por la instantaneidad de los procesos comunicacionales desatados por la revolución digital que siguió a la implosión del bloque soviético y la puesta en público de tecnologías amasadas durante la guerra fría.
Y cuando decimos tecnología nos referimos a conocimiento aplicado a la producción y puesta en valor de objetos y servicios. Y, sobretodo, de símbolos.
La tecnología se convierte en patrimonio cultural cuando es valorada como tal en un contexto cultural concreto. Deja así de ser mera técnica – contingente y fácilmente reemplazable – para convertirse en soporte de una particular manera de resolver la experiencia humana.
La pintura rupestre, la tradición oral de un pueblo o los modos de hacer devienen patrimonio cultural mediante decisiones sociales e históricas sostenidas - de nuevo - en el tiempo y el espacio.
Pero además el patrimonio cultural es el insumo básico que utiliza toda cultura para ser tal y proyectar su propio sentido. Incluso para desarrollar nuevos artefactos tecnológicos.
Pensamos, pintamos, actuamos, amamos y hasta morimos en relación a los símbolos recibidos de nuestra historia identitaria. Incluso cuando creamos símbolos novísimos lo hacemos como ruptura militante con lo heredado.
Vista así, la triada tecnología - patrimonio - cultura adquiere una recursiva complejidad que solo puede ser interpelada desde la experiencia histórica.Y solo hasta el punto de reconocer el inevitable triunfo de la incertidumbre: no importa cuan nuevos sean nuestros soportes tecnológicos, en algún lugar se está inventando una nueva tecnología llamada a decretar la obsolescencia de nuestras novedades.
Ya hemos sostenido que la verdadera Internet – cabecera de playa de la revolución tecnológica de las últimas décadas – fue inventada por Jorge Luis Borges en un improbable verano marplatense. Hubo, también, algunos periodistas que entrevieron el mismo dato.
Una sola frase de Borges – que ya hemos citado – demuestra esta aseveración:
"... imagino al hombre moderno en su gabinete de estudio... provisto de teléfonos, de telégrafos, de fonógrafos, de aparatos de radiotelefonía, de cinematógrafos, de linternas mágicas, de glosarios, de horarios, de prontuarios, de boletines... para un hombre así facultado el acto de viajar era inútil..."
Ahora bien ¿Qué importancia tiene poner esto en discusión? La cultura ha sido definida como conjunto de “relaciones esenciales” construidas “histórica y socialmente”.
Pero esas relaciones esenciales – con la propia comunidad, la naturaleza, las otras comunidades y lo sagrado o trascendente – se construyen mediante los más diversos artefactos. Un templo, un cuadro, incluso un arma solo tienen sentido a partir de esas relaciones.
Algunas miradas se enfocan en los artefactos otorgándoles una autonomía conceptual rayana en el absoluto, subordinando lo humano mismo. Entonces los males humanos están causados por la simple carencia de artefactos.
Pero si Borges inventó antes la red, tal como hemos sostenido, la diferencia que importa es el símbolo. Porque solo este desata las voluntades/ sueños/ pesadillas que viabilizan relaciones y artefactos.
Quizá lo que Borges soñó como símbolo se haya concretado en las redes militares como pesadilla inminente. Oposición dialéctica superada por la caída de un muro y el empuje de ciertas sociedades civiles que se planetarizaron más aceleradamente que otras. ¿Y las comunidades?
Las comunidades – entendiendo por tales a grupos humanos más afectos a los mitos que a los contratos – han ido más despacio. Más pendientes de sus propios ritmos temporoespaciales que de la novedad del artefacto.
Entre la comunidad y las sociedades contractuales median dos racionalidades diferentes respecto del patrimonio. Para estas ultimas el patrimonio necesita ser sostenido en objetos durables que, en un extremo, pueda ser "consumido".
Para las otras el patrimonio forma parte de la cotidiana humanidad: no hay museos ni bibliotecas, solo personas que viven inmersas en sus simbolos. De alli que sean los museos etnograficos los mayores reservorios de objetos pertenecientes a nuestras comunidades originarias.
Entre unas y otras circulan tambien, muchos prestamos, apropiaciones e intercambios patrimoniales y sincretismos varios.
Cada una de estas realidades plantean problemas diversos a la preservacion y difusion del patrimonio cultural.
En algunos casos se trata de dilemas éticos ¿Tiene alguien el derecho de apropiar el patrimonio cultural de otras culturas? ¿Puede alguien, aduciendo particularismos varios, negar el disfrute de su patrimonio cultural al resto de la humanidad?
Otras encrucijadas refieren a problemas técnicos concretos ¿Con que dispositivos leeremos los registros patrimoniales cuyos soportes vayan siendo progresivamente obsoletos? ¿Quien financiará la conversión a soportes más actuales de los registros de los sectores más pobres de nuestras comunidades americanas?
En nuestro blog hemos cubierto algunas iniciativas que oportuamente consideramos promisorias, citamos unas pocas a modo de ejemplo:
Observatorios culturales: un informe para el debate
, Tecnología y desarrollo cultural en el plano local,
El patrimonio cultural en la educación secundariaLa red está llena de las respuestas más diversas a estos temas. Apelamos a nuestros lectores para ir relevando estas experiencias con vistas a un iforme que, quizás, tenga formato de papel.
Notas Relacionadas:

01 septiembre, 2010

Multiculturalidad cotidiana en la Argentina


El director de orquesta, Daniel Barenboin, estuvo en estos días en la Argentina ejerciendo su arte pero también narrando su experiencia entre culturas diversas, cuando no enfrentadas. En una nota al diario La Nación de Buenos Aires expreso algunas ideas sobre las que vale la pena reflexionar desde nuestra profesión:
"Aquí me acostumbré a pensar que no había problemas de identidades múltiples: podía ser judío, musulmán, palestino. Dentro de todas las diferencias está el elemento común de ser argentinos. Es una lección que el resto del mundo todavía tiene que aprender"
La multiculturalidad argentina es una de las constantes de este blog, incluso citando al propio Barenboin como ejemplo de ella. Lo tratamos, más o menos exhaustivamente, en relación a los recientes festejos del Bicentenario.
Conceptualmente pueden diferenciarse los conceptos de interculturalidad y multiculturalidad. También el concepto de identidades múltiples tiene una historicidad que puede rastrearse hasta Freud por un lado y hasta el concepto de inculturación de la liturgia católica por otro.
Entre los argentinos podemos citar - sin ser exhaustivos - el concepto de vacío intercultural de Rodolfo Kusch
Resumiendo: la multiculturalidad tiene una larguísima tradición académica sobre la cual es muy improbable establecer preeminencias de ningún tipo.
Sí tiene, en la Argentina, la particularidad de flotar en el aire de lo cotidiano. Parafraseando a Barenboin y su arte: aquí se puede vivir - y ostentar - las más diversas identidades culturales y encontrarse sin conflictos en una esquina cualquiera compartiendo la música del mundo. Insistimos, en la cotidianeidad de nuestras calles y mercados.
Desde la gestión cultural poco - si acaso algo - es lo que hemos conceptualizado.
De hecho nuestra cultura cotidiana es mucho mas descentralizada que nuestra administración cultural, entendiendo por tal a la estructura burocrática del estado que interviene en las representaciones simbólicas de aquella cotidianeidad.
La gestión cultural argentina necesita dar un debate que cierre el verticalismo cultural de nuestro estado optando por la maravillosa interculturalidad de nuestras calles.
Parece sencillo pero llevamos doscientos años sin hacerlo. Va siendo tiempo de proyectar aquello que nos distingue - ni mejores ni peores, solo distintos - entre las culturas humanas: la azarosa convivencia de lo humano maravillosamente diverso.
La interculturalidad no aparece – por caso – en los ejes de debate del tercer congreso argentino de cultura que habrá de celebrarse entre el 15 y el 19 de setiembre próximos.
Seguramente será planteado en algunas de las exposiciones pero la verdad es que todavía no ocupa la centralidad que, a nuestro juicio, debiera tener.

31 agosto, 2010

La interculturalidad como vacío

En este blog nos hemos ocupado muchas veces de la necesidad que tiene la gestión cultural de abordar, en profundidad, la multiculturalidad creciente de nuestras sociedades como desafío programático central de la época. Cuando hablamos del concepto de interculturalidad entendemos que el mismo:

“… hace alusión a los encuentros que se producen entre sujetos de distintas culturas… la humanidad es y ha sido siempre intercultural, y son excepción los grupos que viven o han vivido permanentemente aislados… entendida como la puesta en práctica de un programa multiculturalista… se trata no solo de aceptar y respetar las diferencias, sino también de valorarlas, y educar a los ciudadanos en los principios-guía de la convivencia entre sujetos culturalmente diferentes.” (Diccionario de relaciones interculturales – Editorial Complutense; Madrid, 2007)
Pensada desde allí la relación con ese otro diverso que habita junto a nosotros un mismo territorio empieza a transitar un espacio de múltiples libertades sostenidadas por personas que, como decía Rodolfo Kusch en su Geocultura del Hombre Americano proyectan sus propios simbólos.
Una diversidad simbólica que convive sobre un mismo territorio físico – la aldea global, en un extremo – produciendo un cierto vacío intercultural. No ya entre observador y observado como decía Kusch para referirse a la investigación cultural sino entre sujetos convivientes.
Aún cuando pertenezcamos a una misma cultura, agregamos nosotros, la complejidad creciente de nuestras sociedades y el propio hecho de proponernos una acción cultural, cualquiera ella esa, nos lleva al borde mismo de ese vacío.
Aún a riesgo de simplificar podríamos decir que cuando intentamos un proyecto cultural intentamos precisamente atravesar ese vacío entre nosotros y ese otro frente a quien pretendemos desplegar nuestro hacer. De allí la necesidad de incorporar, como foco central de la actividad, los horizontes simbólicos involucrados.
El territorio – físico y simbólico – es una oportunidad para construir una estrategia en común con el otro, y eso ya es cultura.
Una cultura que no será nueva en el sentido estricto del término ya que surge de la convivencia de tradiciones y presentes diversos. Pero que será potencialmente nueva en la medida del aprendizaje mutuo hacia un futuro posible.
La multiculturalidad como programa dependerá en gran medida de nuestra capacidad de reconocer el vacío intercultural más como una vivencia cotidiana que como un concepto académico. No estamos seguros de que la formación de profesionales de la cultura este poniendo en esto los acentos necesarios.
“… pasa de ser mero objeto y se convierte en sujeto, dado que se refiere a algo existente. A su vez, en tanto es existente tiene un proyecto o posibilidad de ser. Un proyecto que, en suma, se manifiesta como libertad.”
“Ser un sujeto existente implica ser un ente pensante. El pensamiento, por su parte, se mueve dentro de un lenguaje y este implica un horizonte simbólico. El horizonte simbólico se alimenta a su vez de una tradición, funciona dentro de un presente y facilita el proyecto hacia un futuro. Hace entonces a lo cósmico, y en tanto integra un cosmos o sea un mundo, un mundo conocible, pero un mundo conocido y por eso ese hábitat, hace que la piedra, el árbol, la casa, el prójimo, tengan sentido. Crea así su propia economía, organiza sus instituciones, mantiene su lengua, a los efectos de mantener la constitución de su existir: lo que dijimos o sea, su domicilio en el mundo”.
En extremo podríamos decir que la interculturalidad – como práctica de la gestión cultural – refiere a un conjunto de acciones y, sobretodo, actitudes positivas hacia la más amplia diversidad. Considerándola no ya como dato de la realidad – que lo es – sino y fundamentalmente como un activo cultural estratégico.

06 agosto, 2010

El cine comunitario e indígena se encuentra en Paraguay


El diario La nación de Paraguay informa en una nota titulada “Debatirán integración cultural a través del cine comunitario e indígena”.
“Con invitados de Argentina, Brasil, Uruguay, Bolivia, Perú, Chile, Colombia, México, Canadá y Paraguay, entre el 11 y el 13 de agosto próximo se realizará en San Bernardino, el Encuentro del Lago Ypacaraí, una propuesta de integración cultural a través del cine comunitario e indígena. El evento está organizado por la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia y la Cultura (UNESCO), en colaboración con la Coalición Paraguaya para la Diversidad Cultural, y cuenta con el apoyo de la Secretaría Nacional de Cultura (SNC), con un amplio programa que incluye actividades culturales y proyecciones audiovisuales, con pantallas inflables en las plazas de San Bernardino y de Altos.”
(…)
“Este espacio inédito busca fortalecer el debate público sobre los retos y nuevas estrategias en la difusión y distribución a nivel local, regional e internacional de las obras de temática indígena y comunitaria; recopilar experiencias en la producción y distribución de cine indígena y comunitario; y favorecer políticas nacionales, en especial aquellas relativas a leyes de cine y audiovisual, que den apoyo suficiente a la producción comunitaria e indígena en los países de la región, con énfasis en la realizada por mujeres.”
Industrias culturales, diversidad cultural, perspectiva de género y nuevas oportunidades tecnológicas son los ejes de este encuentro que es, desde el vamos, una buena noticia.
El progresivo crecimiento de la presencia de la Secretaría de Cultura de Paraguay en el debate de las políticas culturales regionales es la otra buena noticia.
Paraguay tiene una enorme riqueza cultural que en muchas de nuestras capitales no se conoce en profundidad, de allí que este encuentro sea una gran oportunidad para que el resto de los americanos empecemos a tomar nota de ella.
Ticio Escobar, su actual Ministro de Cultura, ha difundido esa riqueza desde sus textos  – que muchos tenemos como de cabecera – y ahora desde la función pública. Una coherencia que seguramente potenciará las políticas culturales del hermano país.
Una atenta lectura de los participantes permite observar como organismos internacionales, nuestros estados, la sociedad civil y los profesionales del arte cinematográfico intentan articular estrategias comunes frente a mercados globales cada día más competitivos. Párrafo aparte merece la poca – si acaso alguna – difusión que este evento ha tenido en los grandes medios de la Argentina.

Notas Relacionadas:
La UNESCO y la diversidad cultural

Nuevo Plan de Cultura en Paraguay

04 agosto, 2010

Gestión cultural e industria cinematográfica

El cine argentino está creciendo; por lo menos si tomamos en cuenta las cifras brindadas por la consultora Ultracine del cual se hace eco Punto Panorámico – Secretaría de Cultura de la Nación – en una nota titulada “Números de la Industria Cinematográfica”. Se dice allí que:
“Entre las 12 películas más vistas se destaca la presencia de dos filmes argentinos: “Carancho” en el 9º puesto y “Dos Hermanos” en el 11º, el único estrenado por una distribuidora independiente local, Primer Plano. Por otra parte, “El secreto de sus ojos” de Juan José Campanella sigue su marcha triunfal por el mercado norteamericano sumando una recaudación de 4.967.000 dólares en las 166 salas donde se exhibe desde hace 10 semanas. Cabe recordar que el film se mantiene desde su estreno entre los 20 más vistos de los Estados Unidos y recaudó 9,3 millones de dólares en la Argentina y 8,4 millones en España, por lo que el mercado estadounidense ya es el tercero en importancia.”

¿Cómo puede la gestión cultural aprovechar este fenómeno? Que, según la misma fuente, es global: “… la revista The Economist destaca un repunte de la asistencia al cine a nivel mundial, una tendencia sostenida a lo largo de los últimos cinco años”.

Entre las muchas iniciativas posibles que pueden desarrollarse desde la gestión cultural merece destacarse el trabajo del Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires.  Dice una nota del portal Continta Norte:
“La Provincia de Buenos Aires se consolida como Set de Filmación. Así lo describen las estadísticas del primer semestre del año, que acumulan un total de 366 filmaciones, de acuerdo a datos provistos por la Comisión de Filmaciones de la Provincia de Buenos Aires (BAFILM), dependiente del Instituto Cultural, y las oficinas de Filmación de distintos municipios provinciales”.
Juan Carlos D´Amico – Presidente del Instituto – cuenta cómo lo han impulsado:
“Nosotros hemos desarrollado, desde el Instituto Cultural, el posicionamiento de nuestra comisión de filmaciones en el ámbito local pero también en el internacional, a través de una intensa formalización de los trámites, el posicionamiento de nuestras locaciones y el acompañamiento a plazas claves para filmar, como La Plata y Avellaneda”.”
Además están trabajando con las ciudades de Bahía Blanca, Lobos, Vicente López, Olavarría y Tandil.
Agrega la nota citada que:
“Según datos del Sindicato de la Industria Cinematográfica Argentina (SICA) más del 50% de las filmaciones a nivel nacional se realizaron en la Provincia de Buenos Aires, superando incluso a Capital Federal. Esto sucede debido a la diversidad de escenarios que pueden encontrarse, que van desde paisajes naturales; tales como llanuras y sierras, hasta la arquitectura clásica y moderna de gran parte de sus ciudades.”
La provincia está previendo realizar en setiembre las segundas jornadas de capacitación para oficinas de filmación.
En síntesis ¿Cómo hizo el Instituto Cultural para captar más de la mitad de las filmaciones que se realizan en la Argentina’
- Creo una oficina central en la provincia con proyección nacional e internacional.
- Apoyó el trabajo de las oficinas locales que se proponían posicionarse como set de filmación.
- Promueve la incorporación de otras ciudades al mismo plan de trabajo.
- Normalizó los trámites para facilitar las autorizaciones.
- Capacita al personal de las oficinas locales.
En realidad un plan bastante sencillo en su enunciación aunque complejo dado el tamaño de la provincia de Buenos Aires y, para nosotros, un excelente ejemplo de cómo la gestión cultural puede – y debe – impulsar el crecimiento de las industrias culturales. Vale la pena recorrer el enlace de industrias creativas del Instituto para ver cómo se articula el conjunto de esta política.

03 agosto, 2010

I Congreso Internacional de Gestión Cultural


El Portal Iberoamericano de Gestión Cultural informa que hasta el 15 de agosto está abierta la inscripción en este congreso convocado por la Universidad Nacional de Mar del Plata y la Asociación Argentina de Gestores Culturales. Hasta esa fecha está abierta también la presentación de resúmenes de ponencias cuya versión definitiva deberá enviarse hasta el 30 de setiembre de este año. Su extensión máxima deberá ser 9 páginas A4 incluidos los anexos – tres páginas. Las temáticas previstas son:
- Formación en gestión cultural.
- Cultura y educación. Cultura y medioambiente. Turismo y cultura.
- Investigación en cultura.
- Cooperación internacional.
- Culturas originarias.
- Experiencias culturales comunitarias.
- Cultura para la transformación social.
- Gestión de las artes visuales, de las artes escénicas, del patrimonio cultural y de museos.
- Gestión cultural en el estado, en ONGs y privada.
Más información en el blog de la Asociación Argentina de Gestores Culturales Universitarios.

19 julio, 2010

El patrimonio cultural en la educación secundaria

En una nota anterior comentábamos una iniciativa de la Dirección General de Escuelas de la Provincia de Buenos Aires: el proyecto Huellas. Desde el equipo organizador del proyecto nos hicieron llegar el documento de convocatoria de la edición 2010. Se trata de un excelente modelo de articulación entre educación y cultura que vale la pena leer detenidamente. Se dice allí:

"… en el marco de las celebraciones del Bicentenario de las Emancipaciones Americanas, la Dirección de Educación Secundaria propicia el desarrollo de proyectos que tiendan a:
 la recuperación de la memoria colectiva


 la resignificación de las producciones culturales de las comunidades,


 el diálogo ciudadano para la revisión del pasado, situados en el presente y con una perspectiva de futuro,


posibilitando el repensar la identidad local e histórica, su preservación y fortalecimiento."
En otro acápite del mismo se da cuenta del impacto que el Proyecto Huellas ha tenido en algunas de las comunidades donde se ha desarrollado:
“ESB 9 anexo 2090 Morea (9 de Julio): proyecta, monta e inaugura un Centro Histórico Regional para sumarse a los festejos del Centenario del pueblo. Contó con la colaboración de vecinos y de varias instituciones de la comunidad y la región (EP, Centro de Salud, Museo de 9 de Julio,…).
EEM 4 Garré (Guaminí): investiga sobre la incidencia del ferrocarril en la fundación y desarrollo del pueblo. Se presenta el trabajo a la comunidad con gran afluencia de público. Se inicia el proyecto para declarar Patrimonio Histórico Municipal a la Estación Garré.
ESB La Constancia (Ayacucho): presenta un stand en la Fiesta Nacional del Ternero mostrando el trabajo realizado en el marco de Huellas sobre la Estancia La Constancia, lugar donde se escribiera el Martín Fierro.
EEM 4 Ramos Otero (Balcarce): presenta, en el marco de los festejos del bicentenario, un libro digital denominado “Ramos Otero: 200 años en la historia de un pueblo”. Para dicha producción los alumnos y docentes de la escuela contaron con la colaboración de vecinos locutores y periodistas y de ex alumnos para el proceso técnico de los materiales recabados a través de la investigación.
ESB 2 Bunge (Benito Juárez): fueron invitados y expusieron sus trabajos en cuero durante la fiesta popular que organiza el Centro Tradicionalista de Benito Juárez.
ESB 4 Salliquelló: investiga la obra del arquitecto Salamone en la provincia de Buenos Aires y difunde la información obtenida a través de un CD. Colaboran vecinos y participantes de un grupo yahoo sobre el mencionado artista. Se proyecta serie de charlas en otras instituciones educativas para dar a conocer la obra salamónica.
Es interesante ver cómo la participación de las comunidades educativas se va articulando con otros sectores de los pueblos y ciudades que las albergan: las fiestas populares, los hitos fundacionales, los centros tradicionalistas y las nuevas tecnologías de la información y la comunicación. Los gestores culturales tenemos mucho que aprender de este equipo educativo, del proyecto en sí y, sobre todo, del entusiasmo de los chicos. El patrimonio cultural aparece así como un bien social y comunitario, herencia y también proyecto de más y mejores comunidades.
Los invito a recorrer los diversos enlaces que en la Web han reflejado este proyecto:

 http://www.gba.gov.ar/prensa/noticia.php?idnoticia=7494

 http://www.educared.org.ar/noticias/comentarios.asp?idn=9176

 http://www.intendentesdebuenosaires.com/nota.asp?Id=14176

 http://www.lavozdelasheras.com.ar/actual/actualidad5.htm

 http://www.lavozdelasheras.com.ar/Edicion92/actualidad7.htm

 http://todaslasvocespuan.blogspot.com/2009_11_01_archive.html

 http://www.elinformadoronline.com.ar/nota.php?id=3830

 http://educatodd.blogspot.com/2009/12/proyecto-huellas.html?zx=4198a84acc5c048

 http://elfenixdigital.com.ar/ampliar_noticia.php?id_noticia=6685

 http://portaldelospueblos.com.ar/pueblos/index.php?option=com_content&task=view&id=9109&Itemid=243

 http://www.elfenixdigital.com/ampliar_noticia.php?id_noticia=7872

 http://www.moreanuestropueblo.com.ar/museo.html

 http://abc.gov.ar/lainstitucion/noticiasdeladgcye/v072/default2.cfm?id=25033

 http://diarioel9dejulio.com.ar/?p=3502

 http://www.lavozdelasheras.com.ar/actual/actualidad1.htm

 http://frecuencia9.com.ar/noticias.htm

 http://educatodd.blogspot.com/?zx=a22a551281e9f703

 http://semanariolanuevavozvedia.blogspot.com/2010/05/leandro-n_5365.html http://bibliotecariosydocentes.ning.com/forum/topics/cuales-son-las-tareas-de-un

Nota Relacionada:
Educación, jóvenes y patrimonio: un proyecto cultural bonaerense

Nuevos Municipios: Noticias de un cambio necesario en la provincia de Buenos Aires

Acabamos de poner en línea un nuevo blog llamado “Nuevos Municipios de la Provincia de Buenos Aires”.
Decimos en la editorial de presentación:
Cambiar y permanecer, dos tendencias naturales en cualquier sociedad humana. Salvo en momentos de crisis civilizatorias, ninguna sociedad cambia toda su organización de un día para el otro.
Lo normal en el devenir humano es conservar unas formas y cambiar otras. Así se forma el debate perpetuo: ¿Que conservar? ¿Que cambiar?
Los habitantes de la provincia de Buenos Aires nos estamos debiendo un profundo debate sobre qué cambios necesitamos. Las urgencias cotidianas – y sus crisis – como la inseguridad, el desempleo, la salud o la educación nos impiden ver el mediano y largo plazo.
Y la verdad es que sin estrategias de largo plazo lo urgente no tiene solución; sólo habrá aspirinas para el cáncer. Aunque parezca duro, es trágicamente cierto.
Más de cincuenta movimientos vecinales vienen proponiendo en la provincia la necesidad de crear nuevos municipios. El más antiguo de ellos acaba de lograr la creación del municipio 135: Lezama.
La mayoría de ellos confluyen en la Asociación para el Reconocimiento de Nuevos Municipios de la Provincia de Buenos Aires.
Este blog nace para informar a toda la comunidad nacional sobre la marcha de este cambio necesario.
La participación activa de todas las personas e instituciones involucradas y el más amplio respeto a todas las opiniones políticas serán nuestra guía. Solo falta usted

13 julio, 2010

Ambitos creativos

La creatividad - ya se sabe - es un fenómeno complejo. Todos somos creativos, pero solo unas pocas personas logran ponerlo en escena y, entre ellas, solo una pequeña minoría consigue vivir de su creatividad.Dos notas del suplemento económico del diario Clarín del último 2 de mayo ofrecen un material muy interesante para analizar el tema: “Las empresas apuestan a la creatividad de sus empleados” con la firma de Verónica Surbek y “Una competencia clave” de Verónica Pages.
La primera está referida a la gestión de la creatividad y la segunda a la gestión de la multiculturalidad dentro de organizaciones empresarias globales.
Desde la perspectiva del triangulo de la creatividad ambas refieren al ámbito que juzga y consagra o rechaza la capacidad creativa del talento. Resulta interesante intercalar la mirada de ambas autoras:

… en Globant inauguraron hace tres meses “Globant Labs”. Al estilo Google Labs - precursora en este tipo de acciones - , es un ámbito en el que todos los empleados pueden desarrollar proyectos fuera de agenda, liberar su creatividad, y hasta probar algunas “ideas locas”…” – Surbek –
“… funciona formalmente y cualquier empleado puede aportar ideas o suscribirse para trabajar en un proyecto presentado por sus compañeros de alguna parte del mundo. “Así, cuando uno tiene parte de su tiempo disponible, puede apuntarse a uno de estos proyectos, que cada responsable debe ‘vender’ para lograr la adhesión de los profesionales que necesita para llevarlo a cabo de forma colaborativa…” – Surbek –
En una reunión de directorio de una compañía brasileña, recién fusionada con una organización germano-francesa, el presidente, responsable hasta allí de la compañía alemana, presentó al nuevo directorio una agenda detallada con asignaciones de tiempo definidas para cada tema. El auditorio, compuesto mayoritariamente por brasileños, empezó a reír. Las risas reflejaban una actitud culturalmente diferente hacia la autoridad y la percepción de un exceso de organización por parte del líder de la compañía.” – Pagés –
Lo que ese presidente aprendió fue que formar parte de un directorio multicultural no es tarea fácil. Aún si hubiera sabido de la informalidad de los brasileños o de su resistencia frente a propuestas de agendas rígidas, tampoco habría alcanzado. Su trabajo primordial consistiría en ampliar su mirada y su disposición frente a lo distinto. Trabajar con otros diferentes a uno es hoy una realidad ineludible y, además, garantía de éxito.” – Pagés –
Von der Heide reflexiona: “Ser creativo no siempre significa hacer algo original: a veces implica encontrar nuevas formas de hacer lo mismo. Es decir, hacer más con menos. Y es cierto que no siempre se necesitan grandes presupuestos para generar buenas ideas”.” – Surbek –
El campo de trabajo en nuestro país, entonces, ha profundizado su naturaleza “multicultural”. Para garantizar el mejor desempeño profesional en este contexto, las organizaciones deben ocuparse de la gestión de la cultura…” – Pagés –
Enfocarse, como organización integral, en procesos de análisis de las culturas con las que se comparte trabajo en categorías primordiales para la gestión. Rosinski (2008) propone las siguientes: sentido del poder y responsabilidad, enfoques de administración del tiempo, nociones de territorio y límites, definiciones de identidad y propósito, patrones de comunicación, modos de pensamiento.” – Pagés –
Nadie crea en soledad. La difundida imagen del genio loco creando en su torre de marfil es falsa. Las investigaciones de Howard Gardner y Mihaly Csikszentmihalyi lo han demostrado hasta el hartazgo.
Las personas, para desarrollar su creatividad, necesitan de ámbitos con determinadas características: ni tan laxas que todo sea posible, ni tan rígidas que el talento no pueda expresarse. Y de ámbitos de consagración que permitan orientar recursos – de todo tipo – hacia los procesos creativos.
De allí la importancia de la reflexión sobre qué debe hacer una organización – de cualquier tipo – para favorecer el desarrollo creativo de su capital humano.
En la nota que firma Verónica Surbek aparece claramente un modelo replicable: la organización crea un ámbito para la investigación de nuevos procesos y productos, pero será el interesado quien corra con la tarea de obtener el apoyo de sus pares.
Una interesante síntesis entre laxitud – ensayan “…algunas “ideas locas” – y esfuerzo: quien se pretende a sí mismo como interesado en crear deberá obtener el apoyo necesario para hacerlo.
Y aquí es donde la nota de Verónica Pagés aporta una mirada complementaria de la anterior: las actuales organización son crecientemente multiculturales y esto plantea el desafío de “… ocuparse de la gestión de la cultura”.
En un apunte para nuestras clases de “Elementos de Diagnóstico Cultural” decimos: “…acercarse a una cultura otra supone ser capaz de superar aquello que Rodolfo Kusch define como Vacío Intercultural entre la cultura que observa y la cultura que es observada. (…) Esto supone, aunque parezca obvio, entender al contexto como un mundo habitado por libertades que condicionan nuestro propio accionar y no como un simple mercado (…) Aún cuando pertenezcamos a una misma cultura, podríamos agregar nosotros, la complejidad creciente de nuestras sociedades y el propio hecho de proponerse una acción cultural, cualquiera ella esa, nos lleva al borde mismo de ese vacío. Partiendo además de la enorme diversidad y riqueza cultural de los procesos humanos que estamos viviendo.
Aún a riesgo de simplificar podríamos decir que cuando intentamos un proyecto cultural intentamos precisamente atravesar ese vacío entre nosotros y ese contexto sobre el que pretendemos operar. De allí la necesidad de incorporar a nuestra tarea la posibilidad de comprender los horizontes simbólicos involucrados
.”
Impulsar las capacidades creativas de la propia organización – cultural o no – supone formular ámbitos que aprendan a hacerlo y entender que la multiculturalidad de nuestro mundo requiere de un hacer muy específico: la gestión cultural.

11 junio, 2010

Proyección cultural del bicentenario


Los argentinos descendemos de los barcos; pero también venimos de la tierra. Ambas herencias a un tiempo y conviviendo. Una historicidad que el 25 de mayo de 2010 celebró su bicentenario.

200 años de un estado patrio que intenta organizar a una nación multicultural que registra una enorme diversidad temporal.
La cultura Colla, la Mapuche o la Guaraní – por citar los pueblos aborígenes más numerosos – tienen del tiempo narraciones diferentes que exceden en mucho los doscientos años.
Y sin embargo el bicentenario también los interpela y, naturalmente, les pertenece.El punto es entender que Argentina hereda - como casi toda America - el proyecto civilizatorio de la España del siglo xv, pero no solamente: heredamos, también, al Incario que se proponía a sí mismo como centro del mundo; al proyecto guaranítico de búsqueda de la tierra sin mal y al mapuche que se ancla en una Mapu - tierra - sacralizada.

Sobre esas cuatro herencias culturales básicas se superpone lo que se ha dado en llamar el encuentro biológico y cultural de hombres y mujeres de cinco continentes produciendo un fenómeno cultural único en la historia humana.
Algunos llegados en carácter de conquistadores conquistados luego por la tierra, otros como migrantes expulsados de sus patrias por razones políticas, religiosas o económicas. Y los negros – muy importantes en la herencia cultural que nos dejaron – traídos para la esclavitud por el más brutal de los comercios.
La llamada generación del ochenta – siglo xix – pretende cambiar a ese pueblo mestizo por el inmigrante europeo. Proyecto civilizatorio que intentó reescribir la historia patria - Bartolomé Mitre mediante - para eliminar aquel origen mestizo.
Así surge la idea de los argentinos descendientes de los barcos. Pueblos transplantados según la clasificación de Darcy Ribeiro. Vano intento confrontado por los grandes movimientos de masas del siglo veinte: irigoyenismo y peronismo.
Horroroso plan de supresión de identidad que tuvo en la última dictadura argentina su ribete más trágico. Inútil fracaso de una intelectualidad descarnada de su tierra diría Kusch.

El primer centenario se celebró - fraude intelectual mediante - como si la supresión de identidad hubiera sido consumada.

La reforma electoral de 1912 abrió la puerta al ascenso del irigoyenismo en 1916 que inaugura la republica de masas que aún hoy - 96 años después - sigue sin institucionalidad definitiva.

Es que resulta compleja la convergencia de aquellas diversas identidades culturales en un proyecto civilizatorio común.

La épica de ese intento celebra, a partir de este mayo, sus doscientos años. La revolución de mayo de 1810 supuso recrear el proyecto civilizatorio español mediante la creación de un estado propio.

El estado propio es el centro de aquella gesta heroica, en un punto, inconclusa. Doscientos años después debiéramos estar debatiendo / construyendo un nuevo punto de partida, o renovando aquel.

El contexto - aunque cueste verlo - es el mismo: la creciente planetarización de la experiencia humana. También la pregunta primordial: como construir identidad en ese contexto.

Quizás haya que volver la mirada hacia los proyectos civilizatorios que al cruzarse en estas tierras fundaron una cultura original, la argentina.

El de España ha sido - con sus luces, sombras y crueldades - uno de los proyectos civilizatorios más potentes de la historia humana. Portador – contra su voluntad a veces - de las tradiciones romana, judía, árabe y griega.
Impulsor de un cristianismo que también se pensaba a sí mismo como global, desasido de los estados y transversal a los particularismos locales. Un proyecto civilizatorio que se expresaba, trágicamente a veces, en la cruz y en la espada. Pero también en la gramática de Nebrija y en las artes nacidas a su influjo.
Hoy la cultura humana no toleraría la construcción de un imperio semejante aunque se pretendiera portador de una fe superior. Pero sí promueve la convergencia en grandes proyectos políticos, culturales y económicos.
Incluso es posible pensar culturas que participen a un tiempo de más de uno de esos proyectos. Aunque Huntington y su choque de civilizaciones pretendan negarlo.
Los relatos periodísticos de los festejos argentinos reflejaron esa realidad en alguna medida: descendientes de las más diversas comunicadas de Europa y aún Asia desfilaron junto a delegaciones de hermanas repúblicas latinoamericanas; del servicio religioso realizado en la Basílica de Luján participaron los más diversos credos, incluso aquellos que en otras latitudes viven conflictos ancestrales.
La Argentina mostró al mundo – más allá de pequeñas batallas de cartel entre algunos de nuestros más significativos dirigentes – que es portadora de una identidad cultural compleja y muy abierta. Mostró además que es capaz de expresarla con cierta eficacia estética y técnica, incluso en la reapertura de nuestro Teatro Colón.
Culturalmente hablando el segundo centenario nos encuentra en una posición muy superior al primero cuando pretendíamos una identidad europea que definitivamente no es tal.
Quienes nos dedicamos a la gestión cultural en estas tierras debiéramos tomar debida cuenta de este enorme activo simbólico y desarrollarlo, incluso en sus aspectos económicos.

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27 mayo, 2010

Encuentro de organizaciones culturales comunitarias


El colectivo cultural La Madeja convoca para los días 5 y 6 de junio a un encuentro de organizaciones culturales comunitarias. Dicen en los fundamentos de la convocatoria:

…que en este encuentro se desarrolle un espacio inclusivo, participativo y respetuoso de debate y de trabajo, propiciando a la vez la circulación de ideas, la creatividad, el vínculo y los proyectos comunes entre las organizaciones y las personas participantes.

En el blog del encuentro pueden consultarse el programa, la ficha de inscripción (gratuita) así como un breve cuestionario de reflexión hacia el interior de cada organización participante.
El programa es extenso y ambicioso. Puede bajarse desde el mismo blog en formato pdf.
La verdad es que no conocemos al grupo convocante salvo por las referencias que ellos mismos nos dan.
Y sin embargo nos parece una iniciativa necesaria, como dice la gente de La Madeja: faltan espacios para intercambiar experiencias y miradas.
Entonces ¿Por qué no apoyar a grupos emergentes que empiezan abrir la mirada?

26 marzo, 2010

I Premio Iberoamericano Educación y Museos



El boletín de la Secretaría de Cultura de la Nación informa la convocatoria a este premio:

"Se encuentra abierta la convocatoria al I Premio Iberoamericano Educación y Museos que otorga el Programa Ibermuseos y cuyo objetivo es destacar las prácticas de acción educativa en museos y otras instituciones afines en los países iberoamericanos.
El concurso está dirigido a museos e instituciones que estén ligados a la administración pública (municipal, regional o estatal) o privada sin fines lucrativos, y que tengan experiencia en las áreas de intersección de educación y museos.
Los proyectos inscriptos deben haberse iniciado antes de 2010, pudiendo estar todavía en curso o haberse finalizados como máximo un año atrás. La inscripción permanecerá abierta hasta el 9 de abril de 2010.
"

Aporta, además, un enlace para mayor información.

20 marzo, 2010

Cómo promover la industria cultural

Una nota publicada en el Portal Oficial de la Ciudad de Cali es una buena síntesis de cómo realizar un plan de promoción de las industrias culturales desde una ciudad.
“Argemiro Cortés, secretario de Cultura y Turismo de Santiago de Cali dice: “Éste es un proyecto a largo plazo, apoyado por el BID, por el Ministerio de Cultura, y lo opera Comfandi. En este momento, estamos en un proceso de capacitación con expertos como Jordi Tresserras, quien está realizando una serie de seminarios sobre la importancia de la industria cultural en lo que tiene que ver con el turismo”. Tresserras, un experto en el tema, coordinador del programa de posgrado en turismo cultural de la Universidad de Barcelona, autor de varios libros y cientos de artículos sobre el tema, se encuentra en Cali capacitando a 18 agencias de turismo y trabajando en ofrecerle al turista que llega también opciones culturales. “Las agencias van a trabajar con nosotros –dice el Secretario de Cultura- en aspectos que tienen que ver con la salsa, el teatro, los museos, para hacer una cadena entre los operadores y nosotros para que el turista disfrute y su próxima visita traiga más gente o recomendará la ciudad a sus amigos. Este es un proceso muy interesante que genera empleo, recursos y en la que sale ganando la ciudad”.

El primer rasgo del programa es la articulación desde la ciudad de actores públicos y privados así como con otros niveles del estado. Respecto del sector privado incluye empresas típicamente calificadas como culturales junto a otras ligadas al negocio turístico: “… empresarios de la gastronomía, el turismo, agrupaciones artísticas, transportadores y salsas de exhibición.

La otra es la selección de los dominios artísticos sobre los que se pondrá el acento:
Estamos trabajando en 4 líneas: La salsa, por obvias razones, ya hemos demostrado que el mundo tiene sus ojos puestos en nuestros grupos. El cine, creemos que en Cali se dan todas las condiciones para ello y por eso estamos haciendo el Festival Internacional de Cine y venimos trabajando en la comisión fílmica. Otro aspecto que estamos trabajando intensamente es la música del Pacífico, es decir, todo lo que tiene que ver con la cultura del Pacífico tiene un futuro promisorio. Otro elemento es el teatro ya que Cali, históricamente ha sido una ciudad de teatro. Pienso que vamos bien en estos aspectos relacionados con la Industria Cultural, y esperamos cada día seguir fortaleciendo este proyecto”.

Luego la nota describe los resultados esperados en términos de creación directa e indirecta de puestos de trabajo. En el link referido a Industria Cultural se dice:

Históricamente Cali ha sido una de las ciudades del país más prolijas en el desarrollo de expresiones artísticas y culturales, como la danza, el teatro, la música, el cine y la pintura entre otras. A pesar de ello la falta de formación empresarial ha impedido el impacto social y económico que una verdadera industria cultural puede generar. Los nuevos desarrollos tecnológicos sumados al talento de los artistas caleños ofrecen un cúmulo de oportunidades para el desarrollo y fortalecimiento de la industria cultural. Por lo anterior se requiere la implementación de una plataforma capaz de generar trabajo e impulsar empresas sostenibles del sector cultural y creativo de Santiago de Cali, mediante la información, investigación, capacitación, desarrollo de proyectos, asesoría, conformación de redes, agremiaciones y comercialización de productos y/o servicios con identidad para un mercado global, con miras a estimular el espíritu empresarial y el liderazgo.

En cuanto a metas se agrega: “En el 2011, el municipio de Santiago de Cali será un modelo nacional en la implementación del programa de Industria Cultural, satisfaciendo las necesidades de las organizaciones culturales y artísticas del municipio.” No encontramos en el portal con qué indicadores va a medirse esta meta.

Otro apartado describe al Sistema Municipal de Cultura organizado alrededor del Consejo Municipal de Cultura integrado por diferentes representantes de la sociedad civil, organizaciones culturales, la universidad, los consejos territoriales indígenas y otros grupos de interés.
En síntesis un programa pensado a largo plazo; articulado política y socialmente; con dominios artísticos claramente priorizados; con metas y un órgano participativo como sustento. Impecable desde el diseño; sobre su funcionamiento real opinarán los ciudadanos de Colombia y los resultados que en el tiempo vayan obteniendo.

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18 marzo, 2010

Los videojuegos como industria cultural


Una nota publicada en España destaca que… “El mundo del videojuego ha cambiado profundamente en los últimos veinte años y la percepción que tiene de él la sociedad también ha evolucionado. El reconocimiento del sector del videojuego como industria cultural, en marzo de 2009, ha supuesto un enorme estímulo para las compañías desarrolladoras y distribuidoras nacionales.
Se comentan allí algunos números que grafican muy bien la importancia del debate:
… este mercado consiguió una facturación mundial de más de 38.500 millones de euros en 2008, y registró un crecimiento del 15,2% respecto a 2007. De estos 38.500 millones de euros, más de 15.000 millones se obtuvieron en Europa. España aportó 1.432 millones de euros, y se convirtió en el cuarto país de la UE, y sexto a nivel mundial, en consumo de software de entretenimiento interactivo, por detrás de Reino Unido, Alemania y Francia.

Sobre la estrategia del estado español frente a este mercado se dice:
Reforzar la marca de hecho en España es esencial. En España llevamos años haciendo videojuegos, con mucho éxito tanto nacional como internacional, pero nos faltaba esto. Otras administraciones de países con menor peso en la industria hace tiempo que asisten a las ferias especializadas y apoyan a sus desarrolladores. Y España, hasta ahora, no lo había hecho. Gracias a la plataforma del ICEX, la industria del videojuego español tendrá mayor visibilidad. Algo esencial en un mercado como el nuestro", recalcó Fabriciano Bayo, director de Virtual Toys

Sobre la comercialización se dice:
“… la industria del videojuego está cambiando. Se están abriendo nuevos caminos; caminos en los que las multinacionales no podrán entrar y en los que las pequeñas compañías podrán ganar posiciones. Y es que la necesidad del producto físico, el que llega a las tiendas, es algo obsoleto. El futuro de los juegos interactivos está en la industria online, en las descargas de los juegos a través de la Red

En la Argentina, para adentrarse en el fenómeno, se puede consultar la página de la Asociación de Desarrolladores de Videojuegos Argentina. Se informa allí sobre herramientas de diseño, cursos, eventos, etcétera.
Recorriendo la web encontramos un documento de 2007 firmado por Mónica Jacobo y publicado por la Universidad Nacional de Córdoba donde se describe el fenómeno:

Los videojuegos surgieron en la década del 60´ y alcanzaron la popularidad comercial en los 70´. Su amplia historia de cuatro décadas llega hasta el presente con consolas hogareñas (por ejemplo la PlayStation,4) juegos para instalar en las computadoras personales, juegos multijugador off y online y aplicaciones para dispositivos portátiles como son los teléfonos celulares.” (…)
Mientras en la década de 1980 esta forma de recreación fue considerada una actividad casi exclusivamente para niños, en la actualidad forma parte de la vida cotidiana de personas de un rango etario amplio que incluye adultos.
Es un fenómeno de la industria del entretenimiento que produce dividendos económicos en algunos casos superiores al cine y promueve constantemente avances tecnológicos mediante el lanzamiento de productos que requieren de computadoras y dispositivos cada vez más potentes.
La proliferación de juegos en la vida cotidiana, los ha convertido en un medio que atrajo la atención de agentes del campo artístico. Los videojuegos como objetos culturales de la era informática, han aportado estéticas definidas, maneras de representar el espacio, personajes que incluso han pasado a protagonizar películas cinematográficas como Lara Croft 6, por citar solo una; han recreado géneros como el de aventuras; instaurado otros como los juegos de disparos en primera persona y han dado lugar a la implementación de técnicas nuevas para la creación, llegando a conformar un campo denominado Game Art.
” (…)
El teórico Stockburger11 propone una categorización de las estrategias artísticas en el contexto de los videojuegos que abarca: apropiación, modificación y producción de juegos originales. Consideramos que esta taxonomía puede ser útil para analizar las obras citadas precedentemente debido a que implica diferentes aproximaciones a un mismo objeto cultural de la era digital: los videojuegos, a partir de las elecciones y posibilidades técnicas, económicas y subjetivas de cada artista o grupo de productores.

La autora menciona la existencia de pocos espacios de encuentros y promoción de los videojuegos nacionales.
Desde la gestión cultural estimo que se trata de un dominio de producción cultural al que no le hemos prestado demasiada atención.
Sin embargo el juego es en sí misma una actividad cultural. Y en este caso, además, con un alto componente artístico y con un público creciente.
Quizás debiéramos repensar el concepto mismo de industria cultural y estar más atentos a los nuevos consumos culturales. Apropiar tecnologías y recrearlas dentro de nuestros propios horizontes simbólicos.

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14 marzo, 2010

El Estado como productor cultural

Un artículo publicado el blog Kaniwa de la Dirección General de Bibliotecas de la Universidad Veracruzana pone en discusión el lugar del Estado y su administración cultural frente al mercado del libro. Con el título Paradojas del Gasto Educativo y Cultural en México comienza reproduciendo algunas ideas del ensayista Rafael Pérez Gay:

En otras páginas he expresado mis dudas acerca del tamaño del editor estatal mexicano. Vuelvo a hacerlo aquí: ¿Tiene sentido sostener un Estado-editor de las dimensiones del que tenemos? No. ¿Tiene sentido editar cientos de miles de libros al año con una red no mayor de siete mil bibliotecas y un sistema de distribución que no excede los trescientos puntos de venta como los que regentea el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes? No. Es como comprarse veinticinco llantas de refacción para un solo coche, nada más por si se ofrece.
“Desde luego, no creo que el Estado deba abandonar la edición de libros, pero considero un error que se proponga como múltiple casa editora con los dineros públicos. El fracaso ha sido rotundo: el consumo no aumenta, la distribución es inexistente; en consecuencia, los lectores brillan por su ausencia y la industria editorial vive en un estado de desnutrición grave
.”

El autor no promueve la desaparición del Estado – en este caso mexicano aunque el sayo puede caerle a otros estados – del mercado editorial sino que llama la atención sobre la necesidad de articular esa actividad de un modo que podríamos llamar más industrial:

… hemos llegado al bochornoso escenario en el cual se diseña un plan editorial que quizás elogiarían en España, pero con un consumo como el de Nicaragua y un sistema de distribución y comercialización adecuado para un país como Barbados.” Y agrega: “Si se revisan el cine, el teatro o la música, aparecerá la misma fuerza paradójica: gastar el dinero en la misma casa de gobierno e instalar grandes aparatos sin público. ¿Quiere decir todo esto que el Estado no debe invertir en libros? No: quiere decir que debe gastar en bibliotecas (no en el delirio de una megabiblioteca) y en las editoriales privadas serias que sean capaces de surtir títulos que valgan la pena para enriquecer esos acervos”.

Sin pretender opinar sobre el fondo de la cuestión – asunto reservado a la ciudadanía de México – debemos decir que frecuentemente las políticas culturales van de extremo en extremo: a veces produciendo obras que a nadie llegan, otras contratando artistas con altísimas convocatorias de público que garantizan fama y aplausos a los decisores políticos.
El Estado puede – y debe – ser un productor cultural porque la reproducción de nuestras culturas no puede quedar subordinada al mercado. Pero debe hacerlo con la misma inteligencia de los mercados: construyendo cadenas de valor que garanticen la producción, la distribución y el consumo de bienes y servicios culturales.

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10 marzo, 2010

Observatorios culturales: informe para el debate

Gestióncultural.org, boletín electrónico del Portal Iberoamericano de Gestión Cultural ha publicado un informe sobre el desarrollo de los Observatorios Culturales. Hay además un artículo sobre el Mapa Cultural de la Provincia de Valencia, España, del cual se dice:

Este producto supone, en la práctica, una herramienta de primer orden para el análisis cultural territorial y parte, metodológicamente, tanto del concepto de observatorio como del de mapa cultural, con una vocación de actualización constante de la información agrupada en torno a una concepción integral de la cultura.”

Nuestro blog se ha ocupado varias veces de los Observatorios y Sistemas de Información Cultural así como de los mapas culturales entendiendo la importancia de estas herramientas de gestión cultural. Fenómenos que, aunque heterogéneos, podían considerarse como íntimamente vinculados.
Publicamos entradas sobre el Sistema de Información Cultural de Chile, el Mapa Cultural de Puerto Rico, el Sistema de Gestión e Información de las Conferencias Iberoamericanas de Cultura, el Sistema de Información Cultural de la Argentina, el Laboratorio de Industrias Culturales de la Provincia de Jujuy (Argentina), o el Catálogo Digital del Patrimonio Cultural de la Ciudad de Buenos Aires.
El informe Nuevos Retos de los Observatorios Culturales firmado por Cristina Ortega y Roberto San Salvador del Valle aporta una mirada sistémica absolutamente necesaria.
Desde lo metodológico el informe destaca la falta de una definición única del fenómeno priorizando aquellos que integran alguna de las diversas redes dedicadas al tema. Algunos datos y conceptos a destacar:
- Los observatorios surgen en Europa hacia fines del siglo xx aunque ya había experiencias anteriores a 1970 asimilables al concepto Observatorio Cultural; el 55% de ellos está ubicado en ese continente y el 36% en América.
- Se trata de un “escenario que se va modificando constantemente”. Y en este sentido, agregamos nosotros, es de esperar que estas modificaciones se aceleren a partir del crecimiento del ancho de banda y la velocidad de conmutación entre routers que anuncian las empresas del sector informático.
- Surge de la necesidad de sistematizar la información parcial existente convirtiéndola en una de carácter más global.
- Su objetivo principal es facilitar la transferencia y el acceso a la información y el conocimiento. Esto, claro está, en el marco del paradigma de la sociedad del conocimiento.
- Facilitan la toma de decisiones con vistas al buen gobierno de la cultura. Sin hacer una cuestión semántica nos parece preferible hablar del buen gobierno de las administraciones culturales y de la gestión de la misma. De hecho, en varios párrafos, el informe lo refiere a las políticas culturales.
- Ubica los nuevos retos de los observatorios culturales en torno a los vertiginosos cambios que se están produciendo en los fenómenos asociados al: tiempo, los rasgos sociodemográficos, la esfera socioeconómica, el ámbito sociopolítico y los mestizajes identitarios.
El informe incluye una serie de consideraciones sobre el comportamiento del público frente al consumo cultural así como a los valores implícitos en las opciones culturales de las personas que vale la pena leer cuidadosamente.
Desde la Argentina – y toda Sudamérica, supongo – debiéramos incorpora al debate una serie de aspectos geoculturales, entre ellos el referido al tiempo.
Es cierto que los profundos cambios políticos, sociales y tecnológicos ocurridos a partir de la implosión del estado soviético han alterado, en lo substancial, la relación tiempo espacio. Pero no es menos cierto que en nuestros países conviven tiempos disímiles y no sólo entre las grandes urbes y los espacios rurales. Definitivamente nuestra multiculturalidad incluye también al tiempo.
No son los mismos tiempos organizativos ni valorativos los del carnaval como producto turístico que los de las comparsas familiares de la quebrada de Humahuaca por sólo citar un ejemplo.
En nuestras tierras a los retos listados en el informe que venimos citando debemos incorporar una consideración más profunda sobre los particularismos locales y su articulación con la cultura global. Lo contrario sería condenar nuestras creatividades populares al mero ejercicio de la copia o condenarlas a un atavismo sin destino.

05 marzo, 2010

Modelo de intercambios en gestión cultural

Una nota publicada en el portal noticiasdealaba.com informa sobre una iniciativa de gestión cultural realizada en España y que nos parece un modelo muy interesante. Veamos:

La iniciativa recorrió 3.500 kilómetros durante veinte días, visitando un total de diez ciudades del Estado. Y volverá en primavera de 2011. En el periplo, se han mantenido entrevistas, reuniones y contactos con 19 directores y coordinadores de centros culturales, museos y espacios de arte contemporáneo y otros agentes del mundo de la cultura. "El Tour Inmersiones ha conseguido exportar tanto el modelo de gestión que propugna el Proyecto Amarika como el entramado del arte emergente vasco", apunta López de Lacalle. "El resultado ha sido extraordinario en el terreno de lo concreto, pero también en el plano del aprendizaje. E igualmente extraordinario en lo relativo a proyectos que, si todo sale bien, podremos ver aquí en los próximos meses, y también por el cauce abierto para que artistas de nuestro entorno puedan salir fuera".

Entre los proyectos en estudio se destaca: “… un Archivo de Artistas Emergentes Vascos, herramienta que sería enormente útil para proyectar su actividad en el Estado y visualizarlos de un modo mucho mejor. Podría servir para integrarse en una red estatal que conllevaría consecuencias en términos de mayores oportunidades de trabajo para el colectivo artístico. Además, informó de que, a raíz del debate suscitado por el tour en torno a modelos de gestión cultural, hay varios centros del estado interesados en la realización de jornadas específicas sobre esta materia, donde el Proyecto Amarika detalle su experiencia.

Buscamos el blog del Proyecto Amarika y allí vimos que se trata de un proyecto de gestión cultural de base local y basado esencialmente en la articulación de actores y recursos diversos aunque orientados – en lo sustancial – a la gestión de tres salas. En el enlace que incluimos más arriba está disponible un pdf que detalla con bastante claridad la naturaleza del proyecto, sus antecedentes y sus propuestas.
Nos interesa destacar algunos párrafos particularmente significativos:

Que sea “tutor” de la gestión independiente y de la participación del colectivo de la Asamblea en la misma. Esto es, que sea ecuánime, que no permita abusos de miembros de la Asamblea en el acceso a las posibilidades de producción que ofrece la institución, etc…Que realice funciones de enlace entre la Diputación, la Asamblea y el tejido cultural. Se encargará de la puesta en marcha de la producción, de la logística necesaria para la realización de trabajos y de la coordinación de los asuntos propios de los actos, inauguraciones, etc.
Que realice y presente un informe – proyecto con la programación para las tres salas para un curso e ir proponiendo la puesta en marcha las actividades y convocatorias del mismo.


Aspectos vinculados a la más activa participación posible – gestión independiente, ecuanimidad, enlaces hacia el tejido cultural, etcétera – se combinan con aspectos más duros de la gestión – producción, logística, indicadores, etcétera.
Un proyecto que además se enriquece enriqueciendo a otros colectivos en un “tour de inmersión”. No pretendemos calificar acciones que sólo conocemos de segunda mano pero como proyecto nos parece una iniciativa susceptible de ser replicada en las más diversas geografías.

10 febrero, 2010

CONCURSO por un Máster en Comunicación Web 2.0 - online

Estimados lectores:.

Hemos recibido una invitación a un concurso que otorga como premio una beca para cursar el Máster en Comunicación Corporativa e institucional Digital Web 2.0 online de la Universidad de Alcalá de Henares y el Instituto de Postgrado de Estudios Culturales y de Comunicación (IPECC).
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Según nos informan nuestros amigos del IPECC, este curso suele tener un costo que oscila los 6000 Euros y en esta ocasión, quién gane el concurso, podrá realizarlo totalmente gratis.
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Según describe el sitio del IPECC, para la inscripción debe tenerse en cuenta lo siguiente (textual):
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"Regístrate en nuestro concurso y suma puntos. Para sumar puntos sólo tienes que recomendar nuestro grupo de Linkedin, nuestra página de fan en Facebook o retwittear nuestro tweet sobre este concurso. Por cada nuevo fan, miembro del grupo o retweet de nuestro post, sumarás un punto. La persona con más puntos al final del concurso ganará la beca para realizar de forma gratuita nuestro Máster de Comunicación Web 2.0"
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Para mayor información, visiten el sitio http://concurso.ipecc.net/ o bien contacten a Patricia Martínez a patricia.martinez@ipecc.net
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29 enero, 2010

30000 contactos entre gestión y cultura


"¿Qué Gestionamos? Enlaces entre Gestión y Cultura" nació en el 2006 como apoyo a nuestra tarea docente en el Instituto Superior de Formación Técnica N° 12 (Modalidad Gestión Cultural) dependiente del Ministerio de Educación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Es heredero de la lista de discusión Gestión y Cultura que habíamos desarrollado con idéntico fin y que hoy funciona como lista de difusión con más de 400 suscriptores que reciben, periódicamente, nuestros contenidos.
Durante el año pasado – 2009 – recibimos, según el contador de Motigo, más de 30000 visitas.
Más del sesenta por ciento de ese tráfico proviene del mundo – principalmente hispano hablante – y poco menos del cuarenta por ciento de la Argentina; incluido todo el interior de nuestro territorio. Es decir que ha superado ampliamente la intención que, como docentes, teníamos al comenzarlo. El mapa de visitas que ilustra esta nota es muy representativo de esto que decimos.
Hemos sido enlazados por blogs y sitios de la Argentina, Chile, Colombia, España, México, Puerto Rico, República Dominicana y Estados Unidos.
Este pequeño balance de nuestra tarea no figurará, seguramente, en la historia del marketing pero muestra claramente cómo una iniciativa docente nacida para apoyar su trabajo áulico puede trascender más allá de la institución donde nació. Y con trabajo voluntario como único sostén.
Lo hizo gracias al público que empezó a sumarse a una lista de discusión montada en un servidor gratuito y que sólo aspiraba a servir a un pequeño grupo de alumnos. Lo cual demuestra, más allá de nosotros, que la gestión cultural motiva hoy un interés cierto.
Nuestra carrera fue la primera oferta académica que sobre la materia se dictó en la Argentina. Hoy la oferta es mucho más amplia, diversa y, naturalmente, con calidades también diversas.
Como nos decía un lector mexicano en un comentario privado – que no estamos autorizados a reproducir – la realidad es que en muchos de nuestros países abunda la formación académica pero faltan propuestas de empleo para los egresados.
Muchas veces ocurre que a la hora de contratar una persona para realizar las tares propias de la profesión se recurre más a la amistad o a las lealtades políticas que a la formación académica.
También es cierto que (por lo menos en la Argentina) los egresados tenemos, todavía, una escasa cultura emprendedora. Quizás esa debiera ser, para los habitantes de estas tierras, una prioridad para los próximos años.
Iniciativas como este blog – y muchos otros – ayudan a darle visibilidad a la necesidad de profesionalizar la tarea superando cierto espíritu artesanal –o clientelístico – que abunda por allí.
Como decíamos párrafos atrás buena parte de nuestro tráfico se debe a los enlaces que hemos recibido de otros blogs de modo que vaya para todos ellos nuestro reconocimiento. En particular a las Asociación de Gestores Culturales de Madrid, así como la de Valencia, a la Universitat Oberta de Catalunya y al Consejo Nacional de la Cultura y las Artes de México, instituciones de reconocido prestigio dentro de nuestra profesión.
Concluimos este pequeño balance agradeciendo a nuestros lectores el que nos hayan acompañado durante todo el año. Y reiteramos la lista completa de aquellos que nos han enlazado desde los más diferentes lugares.

Argentina:
Gestión Cultural Luján

Museología al Palo
Desde La Plata – Buenos Aires

Chile – Puerto Montt
Lunático

Colombia
Investigar Kultura

España – Andalucía
Faccendo

España – Cataluña
Hemeroteca de Gestión Cultural
Universitat Oberta de Catalunya


España – Madrid
AGETEC
Asociación de Gestores y Técnicos Culturales de la Comunidad de Madrid


España – Madrid
El Mundo a la Carta

España – Valencia
Asociación de Gestores y Gestoras Culturales
del País de Valencia


España – Castellón
Agitación Cultural desde la Periferia

Wikanda

México
CONACULTA – Consejo Nacional para la Cultura y las Artes

Puerto Rico
Papiro Digital

República Dominicana
Arte Carlos de los Santos

USA
Cultural Identities and Social Movements

Otros
Gestores Culturales sin Fronteras

26 enero, 2010

Industria y producción cultural


Una nota publicada por el portal de la Asociación de Revistas Culturales de España pone en discusión la condición de industrias culturales de las artes escénicas.
Se revisa allí la nomenclatura que este dominio tiene en diversas administraciones culturales públicas de España comparándola con los criterios utilizados en el mundo anglosajón. Se dice en el artículo citado:

Las razones de que las artes escénicas no puedan ser consideradas como industrias culturales se deben a la naturaleza de sus procesos de creación, difusión y recepción, de los que ya hablaron en su día William J. Baumol y William G. Bowen en un conocido estudio en el que acuñaban el sintagma "cost disease" (fatalidad de costos) como característica fundamental de las artes en vivo como la danza, el teatro, el circo, la ópera o el ballet, además de estilos musicales concretos. (…)
“… el debate en torno a las industrias culturales no quiere convertirse en una cuestión bizantina, un diálogo de sordos o una pura disquisición terminológica. Quiere situar las artes en su territorio preciso para mostrar que unas requieren un tipo determinado de tratamiento en la acción de gobierno, y otras de otro tratamiento bien diferente, porque no es lo mismo la música rock que la música clásica, como también son diferentes la difusión del libro y la difusión de la danza.” (…)
“También persigue que la acción de gobierno en el campo de las artes se realice en función de aquello que hace que las artes sean lo que son y no otra cosa, o no cualquier cosa. Bueno es que determinadas actividades, sean artísticas o no, se aprovechen de las ventajas de una "industrialización" racional y cualitativa, pero las artes escénicas exigen otras políticas y otras orientaciones.


Las industrias culturales – y la denominación en sí – han sido, desde siempre, objeto de intensos debates. No poco del cual puede encontrarse en los autores más representativos de la llamada Escuela de Francfort. Otra referencia inevitable es la clásica obra de Umberto Eco: Apocalípticos e Integrados.
Más allá de la discusión conceptual resulta interesante el enfoque planteado en el medio español sobre el lugar que las artes – en este caso, escénicas – y las industrias culturales deben tener en las administraciones culturales de nuestros estados.
El caso de la Argentina puede verse en el organigrama de la Secretaría de Cultura de la Nación donde figuran por un lado una Dirección Nacional de Industrias Culturales y por otro una Dirección Nacional de Artes.
Más allá de lo cual existen elencos e instalaciones de diversos niveles institucionales dedicados a las artes escénicas, por caso el Instituto Nacional del Teatro creado por ley de la Nación o el Teatro Colón dependiente del gobierno estadual de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Desde el punto de vista de la gestión cultural debiéramos debatir también, me parece, cuál deba ser la orientación fundamental del accionar público hacia las artes tanto como hacia las industrias culturales.
Por un lado están los cambios que las nuevas tecnologías le imponen a las industrias culturales e incluso a la gestión escénica que alguna vez tratáramos en una nota titulada “Cambio cultural e industria musical” donde planteábamos, por vía de hipótesis: “Y en consecuencia cabría una pregunta que involucra a todas las industrias de contenidos ¿Qué futuro tienen los modelos de negocio basados en vender soportes? Sea que estos fueren papeles, discos más o menos duros o incluso los modernos pen drive. La verdad es que las redes telemáticas – cada vez más potentes, rápidas y baratas – favorecen la trasmisión de todo tipo de contenidos para todo tipo de uso – trabajo, educación, compra venta de productos, etcétera. No pueden, claro está, trasmitir emotividad, por más que lo intenten.Podríamos arriesgar una hipótesis: sobrevivirán aquellas industrias culturales que logren incorporar emotividad a sus soportes o directamente faciliten el acceso a experiencias más emotivas.” Pero esto es sólo la mitad del problema.
La imagen de un país es la de sus industrias culturales” declaró alguna vez el presidente de Consejo de Dirección de la SGAE (sociedad de autores y editores de España) Eduardo Bautista quien, además, se manifestó en apoyo al:

… modelo por el que se empieza a apostar en Europa "para aprovechar las ventajas que tienen las industrias culturales en el marco de la economía global (...) este modelo cultural se asienta en tres pilares: un proyecto económico, "diseñado por expertos que conozcan el mercado y el desarrollo de las audiencias"; las subvenciones de los poderes públicos, "porque es su obligación"; y el compromiso del ciudadano”.

Allí aparece (desde la gestión cultural, insistimos) el problema en toda su complejidad: en tiempos de profunda globalización de públicos, finanzas y culturas lo que debiéramos problematizar no son ya las artes o las industrias culturales sino las condiciones mismas de la producción cultural de nuestras comunidades.
En primer lugar se trata de la reproducción de nuestras culturas, es decir la creación y recreación permanente de símbolos que nos permitan reconocernos en un mundo propio haciéndolo habitable. Incluyendo las consecuencias económicas que para nuestras comunidades tiene el intercambio con el mercado global.
En segundo lugar la capacidad de legitimar las prácticas artísticas y discursivas en entornos cada vez más competitivos incluyendo en primerísimo plano el involucramiento de la propia ciudadanía en su sostenimiento.
Y, más importante aún, el sostenimiento de la “continuidad y sentido” de nuestras culturas; esto va desde la puesta en valor del patrimonio cultural hasta la proyección de nuestra identidad al mundo.
Aspectos que deben “bajarse” al terreno concreto de la producción cultural: la formación de artistas, el sostén de elencos especializados, el mantenimiento de instalaciones específicas (en algunos casos, sumamente costosas) y la formación de públicos por solo citar algunas de las acciones necesarias. Cada una de estas acciones – y las muchas que no hemos listado paro no abundar – son imprescindibles para garantizar la producción cultural.
La cultura puede ser clave para la economía” decíamos en otra entrada donde además se llamaba la atención sobre el hecho de que el sector cultural suele crecer, económicamente hablando, a un ritmo superior al resto de los sectores.
Pero esto es resultado y la producción cultural es proceso; requiere de tiempos de inversión que exceden largamente los tiempos de una puesta artística. Ese es el bache que sólo puede ser cubierto por la acción del estado y esto tanto para la creación artística como para las industrias culturales que, además, están cada día más imbricadas.
Se requiere adecuar las administraciones culturales a ese nivel de complejidad centralizando las estrategias y descentralizando la ejecución para garantizar la producción cultural en su conjunto y también para que “…la acción de gobierno en el campo de las artes se realice en función de aquello que hace que las artes sean lo que son y no otra cosa, o no cualquier cosa.